27 de abril de 2013

PARAÍSO VERDE

Con un cielo que arrancaba nublado y un leve chirimiri, cuatro madrugadores (Fernando, Javier, Manuel y yo) pusimos dirección a Constantina, confiando en que a lo largo de la jornada se fuera abriendo el día. En la memoria aquellas ediciones de la Sevilla Extreme que siempre recordaba con añoranza y que hoy prometía revivir.
Tras un café en Lora del Río continuamos hacia la Ermita de Ntra. Sra. del Robledo, punto de inicio de la ruta. Comenzamos subiendo por carretera hacia unas instalaciones militares (con la pena de ir dejando a los lados unos magníficos espárragos que serían un referente a lo largo de todo el recorrido) hasta enlazar con el Ramal de Extremadura, por donde circulamos un trecho hasta llegar a las minas del Cerro del Hierro. Por el camino, la primera sorpresa: un zorro mañanero entre un bosque de robles que no sabía si saludarnos o esconderse, hasta que optó por lo más prudente y se alejó. Segunda sorpresa: peonías (o rosa albardera) salpicadas por todo el robledal. También las encontramos de vez en cuando a lo largo de todo el recorrido.El Cerro del Hierro fue la tercera sorpresa. El paisaje de agujas de piedra que se ha formado de manera natural bien merecía una parada: más fotos, trialeras, grutas y hasta observación de minerales. Llegando al poblado del mismo nombre nos incorporamos a la Vía Verde de la Sierra Norte, precioso camino y muy cómodo por el antiguo trazado del ferrocarril que transportaba el mineral extraído de las minas. Mucha gente andando y en bicicleta, de todas las edades, familias enteras y grupos,disfrutando del día y de la zona. Y a cada momento excusionistas con el manojo de espárragos en la mano.
Cerca de San Nicolás del Puerto una avería en mi rueda trasera nos obliga a parar durante más de media hora. Una vez solucionado el problema gracias a la colaboración de Fernando y unos "alicates multitoma" prestados en el pueblo, llegamos al nacimiento del Huéznar, aprovechando la pausa para lavarnos un poco y comer algo. Seguimos por la Vía Verde hasta el Batán de las Monjas, donde nos separamos un poco del camino para ver la casa y "refrescarnos los pies" en un vado del río. Entre el remojón, que si "pasa tú que a mí me da risa" y el jolgorio, no nos dimos cuenta de que allí mismo había una familia en actitud de recogimiento, con unas lamparillas y velas, haciendo algo así como una ofrenda. Cuando nos percatamos hicimos una prudente retirada para respetar su intimidad. Por la hermosa ribera del Huéznar llegamos a la subida que nos llevaría a Cazalla. Este escabroso sendero de unos dos kilómetros de subida en plato chico lo recordaba de la maratón Sevilla Extreme, pero ahora está aún más difícil, porque se han formado unos surcos y grietas donde cabe hasta una persona de pie. Llegada a la plaza mayor de Cazalla de la Sierra para reponer líquido, comer algo y buscar el tradicional y afamado aguardiente, que en esta ocasión no pudo ser. Para otra, pero habrá que llegar más temprano.
Salimos por detrás del campo de fútbol de Cazalla y tomamos la Vereda del Valle o Camino de las Laderas, una bajada técnica donde la mayor parte del tiempo había que llevar la bici al hombro por la cantidad de rocas y escalones a cada tramo. Por aquí empezó a fallarle el trinquete del núcleo a Javier y, como los males nunca vienen solos, para colmo descubre que lleva el bolso bajo el sillín abierto y ha perdido una multiherramienta. Así, a base de pedaladas en falso y golpecitos a los piñones, pudo continuar montado hasta el final, soportando una avería que cada vez iba a más y que le hizo no poder disfrutar plenamente de la ruta. Cruzamos las vías y continuamos de nuevo junto a la ribera hasta Isla Margarita, por otro de los tramos espectaculares de la jornada: todo verde, prados verdes salpicados de flores rojas, amarillas, blancas, moradas, los majoletos en plena floración y cargados, impregnando el aire con su aroma, alisos, fresnos, alcornoques, pinos, olmos, cerezos, un túnel de vegetación verde donde el único color distinto era el de la línea del sendero por donde rodaban las ruedas. Y el agua, las cascadas, el canturreo de los pájaros... Esas fotos, las mejores, están grabadas en mi retina. Simplemente, ¡espectacular!
Y como fin de fiesta abandonamos la ribera para dirigirnos hacia Constantina de nuevo, atravesando unas dehesas de ganadería de cerdo ibérico, subiendo algunas rampas "larguitas", algún que otro repechón y cruzando un curioso bosque de castaños con unas ramas verticales y altísimas. Al final 70 k. En la fuente de la ermita nos refrescamos y montamos el comedor, compartiendo viandas y repasando la jornada. Estupendo el día, inolvidable la ruta e inmejorable la compañía. Gracias a todos y a Fernando por su generosidad.

19 de abril de 2013

RUTA: JEREZ - SANTA ROSA - ROMANINA

Este jueves salimos dirección a la laguna de los Tollos por Santa Rosa, el barro de las semanas anteriores ya se había secado y se podía rodar bien, pero con cierta dificultad, debido a los surcos de los tractores que nos marcan y trazan el camino, en total seis, Diego, Fernando, Rafa Vadillo, Angelmari, un amigo de Diego y el Peperobert, también  se presentó Edmundo  ¡ pero con bici de carretera¡ desertor¡¡¡, en total 50 km., por carriles llenos de vegetación exuberante que casi corta los caminos. menos mal que algunas personas dejan los burros y caballos en los caminos para que se coman las yerbas y nos peguen sustos en las curvas.

16 de abril de 2013

SALIDA DEL JUEVES A LA LAGUNA DE LOS TOLLOS

El jueves decidimos arriesgarnos y coger por el carril paralelo a la autopista de Sevilla , normalmente con el agua caida este mes de marzo, pensabamos que iba a estar intransitable, pero la verdad. no estaba mal, pues el viento ha secado bastante la tierra, eso si, los surcos de los tractores nos jugaron mas de una jugarreta.
LLlegamos a la laguna de Los Tollos y de allí tiramos por carretera hacia Gibalbin, nos desviamos hacia el carril de la derecha de los olivos y salimos al cruce de Nueva Jarilla, antes de llegar al cruce tomamos una foto de los compis con la Sierra de Gibalbín al fondo.

14 de abril de 2013

FOTOS DE AYER

Mar de nubes sobre el Estrecho
Tras pasar el Almodóvar
Subiendo a las casas de El Carrascal

13 de abril de 2013

PARTICIPANTES EN LA RUTA DEL "TAJO DE LAS ESCOBAS"

Participantes en la ruta del "TAJO DE LAS ESCOBAS" hoy. Añádase a Manolomerca que, en esta ocasión, está haciendo la foto. 
Ruta espectacular y dura,  en un día de temperatura benigna y de un levante a veces rabioso.
Sólo lamentar la caída con magulladuras múltiples (solo eso) de Félix, de los MTBVJerez que nos llevó a varios a una retirada precipitada.
Seguro que Joaquín habrá disfrutado con tantas subidas y bajadas de infarto y Ángelmari aumentando sus muchos conocimientos de la zona.

6 de abril de 2013

MAÑANA DE SÁBADO A LAS ANGUILILLAS

En una linda mañana de abril para montar en bici nunca hubiéramos pensado que haría tanto frío: un vientecito N-NO que nos ha obligado a ponernos el culote de cuello alto y el sobrecasco de lana.
No estaban todos pero para suplirlos hoy apareció Paco (R. Matteo Tosatto)  acompañado de Ana, una compañera del Todobike, con quienes hemos compartido ruta. Con los años que llevamos la mayoría montando en bici, tiene mérito que Paco en tan poco tiempo ande como anda: recuerdo que hace nada iba con zapatillas de deporte y pegando acelerones por la carretera. Hoy es capaz ya de retarse a cualquiera y además no ha perdido la buena costumbre de ir animando al pelotón con su jolgorio. 
Unos decían que hacia La Barca. Otros que para la Junta de los Ríos. Al final siempre pasa lo mismo: Lobato echa a rodar y los demás seguimos detrás. Como nos habíamos enterado que mañana es el campeonato de España en Las Anguilillas pues para allá nos fuimos. Por la carretera de la Morabita las cunetas tenían verdín y el agua de las escorrentías no sé de dónde bajaba, porque el relieve es bastante llano. El guía decía que de Capita hacia Trebujena los carriles son duros y no estarían ambarrados. Efectivamente. Sólo algún charco pero poca cosa. Hasta que llegamos al hangar de los parapentes. En la vaquería de al lado nos dijeron que algún ciclista había aparecido por allí preguntando cómo llegar al pueblo, pero que rápidamente había desaparecido entre las roderas de lodo, estiércol y los gusarapos de los canales. Por lo que decidimos retroceder para tomar otra pista seca que desemboca en la carretera Jerez - Trebujena. 
El guía, como los buenos conductores de autobuses en las excursiones (que diría Jesús), tenía ya apalabrado el deayuno en la venta correspondiente. Lógico: es la de su primo. Y allí nos llevó. El desayuno estuvo bien, ateniéndose siempre a lo tradicional, pero a los que se pidieron champán y huevas de mújol les pareció caro. (¡Mi que tiene! ¡Po haberte pedío jamón mismo, que es produtto nasioná!) En ese sitio nos enteramos que el albur (una exquisitez, según parece) no es una lisa (mojonera), porque la lisa es de costa y el albur de río. Pero resulta que se trata de la especie Mugil cephalus, también llamado mugle, mújolllisa, lisa, lizaalbur, cabezudo, capitón o corcón. ¿Entonces en qué quedamos? Alguno a punto estuvo de desayunarse un lenguado a la plancha. Total, que como al final fue verdad lo de la gratuidad al guía, empezaron a lloverle críticas: ¡Vaya cara! ¡Qué bien te lo montas! ¡Eso se llama gañote! Etc. A lo que el dueño nos contestó: "Pues aquí en Trebujena eso no se llama gañote, sino envidia".
Luego subimos al pueblo y cogimos la carretera que, por Alventus, se dirige al río. Como en otras ocasiones, un enorme carguero marchaba buscando la desembocadura, navegando paralelo a nuestras bicis. Como también es habitual, vemos patos, fochas, garzas, y a lo lejos, también un cormorán en vuelo. Pero, cuál no sería mi sorpresa, cuando descubro que el pájaro que viene acercándose cada vez más no es un cormorán sino un precioso ejemplar de Ibis eremita. ¡La primera vez que lo veo en libertad!
Pensaba que íbamos a continuar junto al río hasta Sanlúcar, y que por allí iba a haber barro. Pero me dijo Lobato que seguiríamos por la carretera del práctico hasta La Algaida. Llegando a las compuertas, mosquitos, más mosquitos y nubes de mosquitos. ¡Menos mal que llevábamos el culote de cuello alto y las gafas, que si no...! Por allí vemos algunas parejas y grupos de ciclistas, pero de campeonato de España ná de ná. Entonces me doy cuenta de que, por mucho que estemos en el Guadalquivir frente a las barcazas de los riacheros, la carrera no es en las Anguilillas ni en las Angulillas siquiera, sino en las Aguilillas, al lado de Jerez, y nosotros aquí... ¡Me cago en las mulas de la n!
Cuando estamos todos esperando en la entrada del pinar de La Algaida, hartos de mosquitos, siguen Francis y Lobato de largo por la carretera del práctico, espetándonos "Es por aquí. No espero a nadie". Se escuchan los correspondientes reproches e improperios pero todos lo seguimos. Teníamos que coger una desviación a la izquierda para salir justo enfrente a la carretera de El Calvario. Pero nos la pasamos y llegamos hasta el final, teniendo que coger un tramo de la Chipiona - Trebujena, con muchísimo tráfico. En la de El Calvario llega la venganza de modo que no esperan a Lobato ni en el cruce de Añina. Me vengo con él ya a un ritmo más cómodo hasta Jerez y nos pasamos por Divina por si hubiesen parado allí. Llegamos a tiempo, justo en el momento en el que los demás abrían el paquete de patatas e iba a dar comienzo la tertulia.

5 de abril de 2013

¿QUIÉN ES QUIÉN?

Y ahora, ¿quién es capaz de reconocerlos?

1 de abril de 2013

MAS FOTOS DEL VALLE

Hasta 23 nos juntamos este año.

Joakines El Trepador


Doctor, todas las noches sueño con una cruz............¿ es grave ?

¿ Quien dijo fango ?
La cuenta final ascendiô a 150 leuros. ¿ a cuantas cervezas por cabeza ?
Fotos gentileza de Miguelon y Rafa "Pijus Magnificus".