Hoy, por fin, se ha producido el estreno de la nueva equipación de los Mantekas. Es la tercera
en la ya dilatada vida de este variopinto grupo que aglutina lo “mejor de cada
casa bikera”.
El estreno no podía sino celebrarse con la nueva hora: las 8 de la mañana (la de los encierros de los San Fermines) de una mañana fresquita
de este fresco verano que no parece verano ni na.
Fieles a la cita allí comparecieron los Renzo, Joaquín,
Tino, José María y Juan Lozano. A éstos últimos les cabe el orgullo de haber
sido los promotores y gestores de la nueva equipación. Una ropa muy chula, de
calidad (ellos no merecen menos) y con un diseño fashion: rosita y con un
monigote jabugueño. Alguna santa no pudo reprimirse el “eso no te lo pones tú
(Juan)”. Están para comérselos, salvo José Maria, que es todo huesos, que ni rellena el culote por bueno que sean los elásticos de éste. Un
grupo muy presentable, la verdad, y no lo ha sido más porque Rosi aún espera la suya, dado
que no es que le enviaran una talla menos, es que le enviaron la talla 0.
Tras los típicos saludos y típicas fotos de José María
(míster Kodak), nos pusimos en marcha, pero despacito, no sin antes recordar a Angelmari, que está recuperándose de una “corná atravesá” con trayectoria de 7 cm.
Tan esperada fecha no podía tener mejor ruta para de
celebración que la propuesta por el orientador
del grupo (para eso es el orientador del Coloma): la del Canal de las Moras, de La Suara a
Torrecera.
Allí llegamos tras un rápido desayuno en el bar de las Mesas del Corral, en el que
debatimos si ponían o quitaban un techado de madera de la
terraza en la que solemos reponer fuerzas y en el que llegamos a saber por José
María que lo menos que se despacha en tostá es la mitad de medio mollete chico.
Vamos, un par de migajas, dijo Renzo (no se le va una).
En la travesía del Canal de las Moras Juan Lozano enganchó
(y rompió) el maillot nuevo. La cara que puso fue la de De Gea cuando lo
nombraron “persona non grata” en el pueblo sevillano de Paradas. “Es mesté ve
el estreno de la ropa”. Le faltó na para
proferir un “estoy hasta los cojo… de toh nosotro”. Ni probamos las moras. Tanta fue su contrariedad que decidió volver
por carretera por más que hoy le sobrara tiempo para trabajar a medio
día. José María y Rosi se solidarizaron
con el que iba como un acerico. El resto continuamos por los canales hasta Las
Pachecas, siguiendo a nuestro orientador, feliz porque la ropa no podía tener mejor bautizo que el de las zarzas joías. Buena ruta circular, Joaquín.
Ya en La Teja, al regusto de la cervecita fresca y de unas aceitunas contás, planeamos ir pronto a Gibraltar (¡español!). Y es que no sabemos qué hacer mientras
Ángel se recupera y le da el merecido
relevo al orientador.
Buena mañana hemos hechado
ResponderEliminarFernando aún volviendo sin respiro y rápido por carretera Juan llegó a la hora justa. Lo bueno es que le dimos a Joaquín la oportunidad de terminar por los canales la magnífica ruta propuesta para este acto de celebración.
ResponderEliminarMis condolencias a Juan L. (Al menos no fue por caída. ¡Fíjate lo que le pasó a Dan Martin en el Tour!) Es que lo llevasteis engañado: el canal de las moras... ¡Qué bien suena! Si le hubierais dicho que en realidad se trataba del "estrecho carril de las zarzamoras" (y por ahora más zarzas que moras)... otra ruta habría cantado.
ResponderEliminarEn fin, "seis rosas" (una más cinco) y un "clavé". Con tanto aroma y tanto talento aquello debía parecer "el parterre florido del ingenio y el jardín de la galantería".
Ni madrugones, ni arañazos, ni polvo, ni calor ni "ná". ¡Qué envidia me dais!"
Sí. Mejor zarzamoras por no confundir con el rico fruto del árbol tan exclusivo de los bombix mori.
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