MAREA BAJA

Será por deformación profesional, pero acostumbro a establecer la temporada ciclista desde principios de septiembre hasta finales de agosto. Y hoy he realizado el último recorrido de la temporada 2011-2012. Han sido 115 salidas con un total de más de 6.600 kms, lo que para BTT y tratándose de un aficionado no está mal. La valoración general es buena porque, sobre todo, no he  sufrido accidentes o lesiones importantes, lo que me ha permitido una progresiva continuidad, sin grandes parones ni por la climatología ni por otros motivos.

La gran mayoría de las salidas (entre semana y por las tardes) las he realizado en grupo y se han limitado a los alrededores de Jerez. Pero cuando las circunstancias han sido adecuadas hemos ampliado los recorridos a otras localidades y términos municipales, como Pto. Real, Rota, Sánlucar, Trebujena, Lebrija, S. José del Valle, Torrecera, Paterna, Medina, etc, siempre con salida y meta en Jerez. Con acercamiento en coche he realizado también varias rutas por la sierra de Grazalema y Los Alcornocales. He participado en cicloturistas y maratones BTT organizados para ir descubriendo nuevos paisajes, como los de los montes de Cortes (Ubrique), La Muela (en Vejer) o Almoraima (Castellar). Y sobre todo conseguí inscribirme y finalizar satisfactoriamente mi novena participación en los 101 de Ronda.

115 salidas en un año supone una salida cada tres días aproximadamente y con un promedio de casi 60 kms. por salida, o sea, "sin prisas pero sin pausas". Inevitablemente el desnivel positivo ha sido mucho mayor que el negativo (aunque las matemáticas y la física se empeñen en que el resultado final es siempre igual a cero) y mayor también el viento de cara que a favor. He ido comprobando la evolución y mejora paulatina en mi forma física hasta alcanzar un punto óptimo hacia el final de la primavera, que es cuando tenía prevista la participación en los 101. Pero este último mes he notado ya el kilometraje acumulado y la recuperación de cualquier esfuerzo era ya mayor. Los años no pasan en balde y mi cuerpo me está pidiendo a gritos un merecido descanso. Habrá que hacerle caso. He disfrutado mucho de los compañeros (de los de siempre y de los nuevos), de las buenas conversaciones (divertidas, picantes, polémicas), de los recorridos con los LoLos y de los piques con los más competitivos. Todavía me ilusiona cuando va llegando la hora de quedar y comienzo a preparar la bici y la ropa. Cada vez me enamoran más los caminos y carriles, los paisajes y la maravillosa luz de nuestra tierra. Me sorprende contínuamente la cantidad de variantes nuevas que voy aprendiendo por más años que lleve montando. Me pareció una extraordinaria iniciativa la celebración de una colectiva, donde más de cien ciclistas de varios grupos de nuestra localidad nos congregamos en una ruta común. Tenemos pendientes aún muchos itinerarios para ir ampliando el mapa provincial, buenas ideas que poco a poco se irán concretando.

Hoy hemos salido cinco con dirección a Pto. Real. Lo importante no ha sido una velocidad media alta sino un ritmo cómodo y constante. Pero eso ha propiciado un recorrido agradable en un luminoso día de poniente.